La vida no se mira, se siente. Acaso tenemos conciencia de que en este mismo instante nos estamos moviendo junto con la tierra que nos alberga. No, y sin embargo así es. En el devenir de la vida, lo que marca el ritmo de nuestras emociones es lo que cada uno puede percibir y no lo que las cosas son en realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Y vos que pensas?